Saponaria, Jabonera, Hierba jabonera
(Saponaria officinalis)
En la naturaleza encontramos la saponaria frecuentemente en riberas y paisajes de prados. Debido a sus componentes a menudo se ha utilizado en otras épocas como jabón y todavía hoy existen museos que utilizan el extracto de saponaria para limpieza de objetos delicados. La planta de una altura aprox. de 70 cm florece en Julio, Agosto, Septiembre y Octubre. Además las flores despiden un agradable aroma en el atardecer, y es en este período cuando son visitadas por mariposas nocturnas, abejas y avispas.
Suelo: Suelos húmedos ricos en nutrientes, en la naturaleza la encontramos en suelos arenosos o calcáreos.
Luz: sol directo o semi sombra
Multiplicación: vegetativa separando el rizoma la planta se puede multiplicar perfectamente en el jardín. La multiplicación por semillas también funciona muy bien.
En invierno: Resistente al invierno, no necesita protección especial
Usos:
En el hogar: se puede usar como detergente, ciertas partes de la planta trituradas (hojas y raíces) en agua y mezcladas con un mixer o minipimer, crean una espuma espesa. Como jabón o para el cuidado de la piel disminuye los picores y suaviza la piel y el cabello
Medicina: Ya desde antes de la Edad Media la planta (normalmente las raíces y el rizoma) era utilizada por los físicos árabes externamente desde para las infecciones causadas por hongos a eccemas o incluso para la lepra. Los hongos ”pie de atleta”, mejoran sustancialmente con los baños de pies diarios, así como cataplasmas para diferentes partes del cuerpo. En la Edad Media se aplicaba también contra la tos, bronquitis y otras enfermedades del aparato respiratorio superior. Además, la aplicación interna es efectiva como diurético y anti reumático.
De cualquier forma, esta planta es algo tóxica y con sobredosis pueden presentarse diarreas y vómitos. La dosis máxima diaria de raíces secas no deben superar los 1,5 gramos.
